Bodyland / Campo corporal

Artista: Nikolett Balázs (Hungría)
Espacio: Sala de Arte Fundación Minera Escondida Antofagasta
Acompañamiento curatorial: Richard Gregor (Eslovaquia)

Cuerpo antiguo y eterno une a dos jóvenes artistas de Europa del Este -la húngara Nikolett Balázs y el eslovaco Štefan Papčo- nos habla sobre distintos tipos de memoria, la humana y la social. En el primer caso, se trata de una memoria arquetípica de carácter original y universal. En el segundo, dela posibilidad de proyectar relatos relacionados con la historia de una actividad humana concreta como lo es el montañismo. Ambas alternativas desempeñan un papel cada vez más importante en nuestra zona geográfica.

Un territorio que tiene la experiencia de una dictadura totalitaria -y esto sin duda el espectador chileno lo conoce muy bien- produce una memoria extremadamente rica en torno a la maldad humana. Tal memoria, sin embargo, puede comportarse de manera muy ambivalente. Es capaz, en un sentido moral, de unir y conducir a una comunidad a grandes convulsiones históricas, pero por otro lado puede polarizar a la gente hasta el punto de la intolerancia extrema y la deshumanización.

Tras la adhesión de los países de Europa del Este a la Unión Europea en 2004, pensamos que las huellas de los antiguos regímenes, tanto fascistas como comunistas, desaparecerían gradual y permanentemente, sin embargo la realidad actual muestra todo lo contrario. La cartografía que propone Papčo de los montes Tatras, visibles para todos, pero solo accesibles para un puñado de deportistas aptos que podían escapar ahí de cualquier totalitarismo represivo, no se parece en absoluto a un romántico cuento de hadas sobre un pasado lejano.

De semejante manera podemos aproximarnos hacia los objetos de Nikolett Balázs. Las formas escultóricas arquetípicas del siglo XX pasaron, de mano de los vanguardistas experimentales de entreguerras, a lo informal, al minimalismo o al arte pobre. A medida que nuestra memoria de la Segunda Guerra Mundial se fue desvaneciendo, también fueron cambiando las referencias de arquetipos, digamos, de lo esencial a lo estético. La creciente efemeridad de la realidad que vivimos, sin embargo, devuelve a escena precisamente esta singularidad de formas universales y sorprendentemente tranquilizadoras.

Las propuestas de ambos artistas presentan escenas con materiales tanto permanentes como efímeros. Uno pasa por la instalación de Papčo como por textos codificados, como si fuesen los eslóganes de una manifestación en un idioma extranjero. Caminar por la instalación de Balázs, en cambio, resulta más natural, abierta a otras (todas las) posibilidades, permitiendo trayectorias y acontecimientos libres, sin disciplina, sin necesidad de mirar un mapa.

Las instalaciones de ambos artistas, por su naturaleza y su carácter opuesto, se compenetran mutuamente. Pueden repetirse, pueden volver, pueden absorber o repeler, o pueden durar indefinidamente.

Richard Gregor, curador
Director de la Galería Peter Michal Bohúň de la región de Liptov
Liptovský Mikuláš, Eslovaquia

Nikolett Balázs (Hungría)
Artista afincada en Budapest, donde se graduó como pintora. Ganó el concurso Secondary Archive, de la sección Hungarian young art scene y ha sido seleccionada recientemente para participar en MANIFESTA 14 Prishtina y VISEGRAD FUND Residency en Nueva York. Trabaja principalmente con material icónico de las mujeres artistas del siglo XX. Habita el espacio con sus esculturas, completando el mundo existente con ese orden formal que falta, influido por los entornos rurales del este de Hungría. 

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