Artista: Santiago Vélez (Colombia)
Espacio: Parque Cultural Ruinas de Huanchaca
Al contrario del arquetipo, un desierto no se define por la ausencia de agua. El paisaje desértico está formado por la memoria del agua.
La memoria del desierto es una apuesta por recobrar, durante un periodo de tiempo, una memoria de lo que allí pudo ser. Para el de Atacama, el agua del océano que lo cubrió o de los ríos que lo surcaron en el trasegar del tiempo, se presenta aquí como un hilo tenue que más que mojar, refleja el entorno, configura el espacio y adecúa la presencia del visitante a su imagen inserta en un paisaje que, si seguimos así, desaparecerá no solo geográficamente, sino también en el imaginario de aquellos que, obstinados, quieran recordarlo.
O, por qué no, podemos estar también frente a un riachuelo de plata, que brotó desde la antigua fundición de este metal.
Santiago Vélez (Colombia)
Ph. D. en Estudios Avanzados de Producciones Artísticas de la Universidad de Barcelona (UB), artista plástico y visual cuyos intereses de investigación giran en torno a la idea del agua como espacio de confluencia ambiental, política, económica y social. Con su práctica artística ha desarrollado proyectos, exposiciones, investigaciones, residencias, curadurías y docencia, y su trabajo de investigación y creación ha sido reconocido con diferentes distinciones como becas y premios.
La participación de Santiago en SACO1.1 cuenta con el cofinanciamiento de la Fundación Viajelogía (Colombia).