Artista: Borghildur Indriðadóttir (Islandia)
Espacio: Parque Cultural Ruinas de Huanchaca
La edad de las paredes se mide con la escritura que los cuerpos dejaron sobre ellas. Son como hojas en blanco que con el tiempo se llenan de contenido. Pero no de mensajes legibles, sino de códigos, garabatos, manchas, todo un lenguaje críptico que como arqueólogos tratamos de descifrar. Es un mundo de formas lleno de misterio.
La exposición fotográfica de Borghildur explora los muros en relación con la historia y su percepción contemporánea, uniendo hilos a primera vista lejanos, como lo hace Patricio Guzmán en Botón de Nácar. El 13 de septiembre de 1973, los clientes de un bar clásico y bohemio de Islandia, se sentaron en los lugares de siempre, para tomar algo y leer el diario. Varios se enteraron este día de la existencia de un país que tiene una forma muy rara, es muy largo y muy estrecho. Y de alguna manera también es una isla.
Borghildur Indriðadóttir (Islandia)
Artista visual islandesa cuya obra explora la relación entre las texturas arquitectónicas y sus tejidos sociales. Con un método interdisciplinar, que incluye la arquitectura, la actuación y la interpretación, utiliza diversos medios, como la instalación, la fotografía y la performance. Sus obras se caracterizan por la interacción entre lo visible, lo tangible y lo oculto. Su experiencia a través de un juego alucinatorio y cambiante, trata de evocar una serie de emociones que van de la intimidación a la vitalidad, desde la intimidación hasta la vitalidad.
La participación de Bolghildur en SACO1.1 cuenta con el cofinanciamiento del Fondo Islandés de Artes Visuales y el Centro de Arte de Islandia.